Todos odiamos que nuestras mascotas hagan sus necesidades en lugares en lugares que queremos mantener limpios. Ya sea que vivas en un piso o que quieras cuidar el jardín de tu casa, es beneficioso saber cómo enseñar a tu perro a orinar en lugares donde prefieras que lo haga. Tú perro no puede decirte cuándo tienes ganas de orinar, pero, por suerte, puedes acostumbrarlo a expulsar su orina en el lugar que quieras por medio de un condicionamiento o entrenamiento.
Elige un lugar para que el perro orine
Escoge un lugar para el pipí del perro fuera de las zonas más transcurridas de tu patio. El lugar que elijas debe ser apropiado para el tamaño de tu perro. Un área pequeña puede estar bien para un un perro de raza pequeña, pero las razas más grandes van a requerir más espacio. Tu perro no va a querer seguir orinando en una pequeña área que se vuelve muy apestosa y sucia.
A veces, un perro selecciona su propio lugar. Si tu perro vuelve a menudo a una zona determinada para orinar, intenta que ésta sea la zona del baño, ya que le costará menos adaptarse. Pero asegúrate de que el lugar elegido no te incomode de alguna manera y no pueda ocasionar daños al jardín.
Mantener el área limpia
Es importante mantener limpio el lugar de tu perro. Puede dejar una pila en el lugar durante el entrenamiento para que tu perro sepa que es el lugar correcto, pero asegúrate de no dejar más que eso. Si ensucias demasiado la zona que has seleccionado para que tu perro haga sus necesidades, tu perro podría buscar alivio en otro lugar y eso es exactamente lo que quieres evitar, que orine y expulse sus heces por toda tu casa.
Utiliza una orden
Una de las formas más fáciles de entrenar a tu perro para que vaya sólo a un lugar a hacer sus necesidades, es entrenarlo para que entienda una orden. Lleva a tu perro con una correa al lugar que quieres que use, y utiliza la palabra clave. Mantén a tu perro en ese sitio hasta que orine, luego ofrece una recompensa. Sólo recompensa al perro cuando vaya a orinar ese lugar en específico.
Limítate a un solo lugar
De las misma manera en que no se le permite que un perro no entrenado tenga libertad de movimiento en la casa, un perro que no está entrenado para ir a un lugar a orinar no debería tener libertad de movimiento en su jardín. La mejor manera de evitar que su perro salga del lugar que usted eligió es amarrarlo con una correa.
Ubícate en el lugar que has elegido y espera a que el perro vaya. No dejes que explore otras áreas del patio hasta que eso ocurra.
También puedes usar una valla para bloquear el área. Pon a tu perro dentro del área cerrada y dale la señal para que orine. Deja salir a tu perro del área solo cuando haya hecho su trabajo.
Recompensa el buen comportamiento
Si tu perro te hace caso y orina en el lugar correcto, dale una recompensa. Tan pronto como tu perro se vaya, elógialo y suéltale la correa para que pueda jugar en el patio. Si tu perro no va, llévalo adentro e inténtalo nuevamente más tarde. No permitas a tu perro correr por el patio si aún ha hecho pipí.
Lee el lenguaje corporal para saber si quiere orinar
Durante las horas en que le permitas a tu perro jugar, intenta supervisarlo lo más que puedas. Vigila el lenguaje corporal del perro.
La mayoría de los perros dan una señal de que están a punto de hacer sus necesidades. Se pasean, giran o huelen. Si notas que tu perro tiene alguno de estos comportamientos fuera de la zona de orinar que has elegido, haz que pare y llévalo al lugar correcto.
Si tu perro orina antes de que puedas detenerlo, entonces deja de jugar y llévalo al interior de la casa. Si tu perro hace sus negocios en el área apropiada, recuerda recompensarlo.
Problemas de comportamiento
Si tu perro se las arregla para salir del lugar que elijas, asegúrate de limpiarlo rápidamente. Recoge la caca o enjuaga la orina con una manguera.
No castigues a tu perro regañándolo o golpeándolo. En lugar de esto, ignora el comportamiento e inmediatamente llévalo adentro. Tu perro aprenderá rápidamente que si elimina sus desechos en el lugar adecuado, podrá jugar, mientras que si no hace sus necesidades en el lugar correcto, el tiempo de juego se le acabará.
Puede probar este entrenamiento cuando no estés en tu casa con tu perro. Por ejemplo, cuando visite la casa de alguien, pregúntale a qué lugar prefiere que vaya su perro. Lleva a tu perro a ese lugar, dale la orden de ir al baño y espera. Lo mismo puede hacerse en un parque público, escogiendo un lugar apartado.
Entrenamiento de papel para enseñar al perro a orinar
No es recomendable entrenar a su perro para que haga sus necesidades con papel a menos que haya una razón específica para hacerlo. Por ejemplo, puede que quieras entrenar a tu perro con papel si vives en un piso alto y tu perro no puede «aguantar» hasta que salgas, o si tienes un perro sin entrenar y tienes problemas para moverte, o si tienes un perro que se niega con fuerza a hacer sus necesidades en el exterior.
Si decides entrenar tu cachorro o perro de esta manera, ten en cuenta que el entrenamiento de papel lleva a un período de confusión en caso de que luego intentes llevarlo a hacer sus necesidades al aire libre. Un perro entrenado con este método aprende que es aceptable hacer sus necesidades en el hogar y puede desarrollar una preferencia por eliminar sus desechos en una superficie específica, como el periódico, las almohadillas de entrenamiento en el hogar o los pañales para adultos. Así que si por alguna razón planeas hacer que tu perro salga al aire libre, es mejor enseñarle a hacerlo desde el primer día.
Entrenar a tu cachorro o perro para que use un área empapelada en tu casa lo puedes lograr de manera muy similar que entrenándolo para que salga al exterior. Encierra a tu cachorro o perro por un período de tiempo, y luego llévalo con una correa al lugar donde tienes el papel o las almohadillas. Espera a que se vaya. Recompénsalo con regalos por ir al lugar correcto. Al mismo tiempo, intenta manejar los accidentes fuera del lugar donde está el papel, como lo harías si estuvieras entrenando a tu perro para eliminar sus desechos en el exterior.
Aplaude para asustar a tu perro si lo atrapas orinando o defecando en otro lugar diferente del establecido, llévalo o tómalo por el collar para guiarlo, y corre hacia el periódico u otro arreglo con papel para que pueda terminar en el lugar apropiado.
Restrinje el acceso de tu perro a una pequeña área de tu casa para que siempre puedas vigilar su paradero. Su tendencia de volver a la zona empapelada aumentará si aumentas gradualmente su acceso a nuevas zonas de la casa.
Algunos perros son descuidados a la hora de mantenerse dentro de los límites del área donde tienes los papeles. Asegúrate de que los papeles se cambian con frecuencia para que tu perro no se vea obligado a mover el papel para evitar que se le ensucien las patas. Puedes ayudar a tu perro a comprender dónde quieres que elimine sus desechos si de alguna manera puedes delinear el espacio visualmente para que lo pueda captar con más facilidad. Se puede colocar una valla baja en el jardín para rodear el área elegida con una abertura para que tu perro se mueva por medio de ella.
Otra opción es colocar una lona de plástico en el balcón y poner césped encima. (Para probar esta opción, debes tener un balcón cerrado y seguro por la seguridad de tu perro). El beneficio de esto es que tu perro podría desarrollar una preferencia hacer sus necesidades en el césped, por lo que estará cómodo si luego quieres que vaya al exterior.
A veces tu perro no tiene la culpa, ten paciencia
Si tu perro se hace sus necesidades en el interior de la casa o en momentos y lugares inapropiados, es importante que visites a su veterinario para descartar causas médicas antes de hacer cualquier otra cosa. Algunas razones médicas comunes para la micción y la defecación involuntaria pueden ser:
Incontinencia causada por problemas médicos: La manía de orinar por todos lados de algunos perros es causado por la incontinencia, una condición en la que un perro perro puede vaciar su vejiga sin la intención de hacerlo, de la misma manera en que pasa con los humanos. Los perros con problemas de incontinencia a menudo parecen no saber que se han orinado. A veces, vacían la orina mientras duermen. Una serie de problemas médicos -incluyendo una infección del tracto urinario (UTI), un esfínter debilitado, problemas relacionados con las hormonas después de haberse hecho una cirugía de esterilización, cálculos en la vejiga, diabetes, enfermedad renal, enfermedad de Cushing, problemas neurológicos y anormalidades en los genitales- pueden generar incontinencia urinaria. Antes de intentar entrenar a tu perro para que orine en cierto lugar, consulta con el veterinario de tu perro para descartar problemas médicos.
Malestar gastrointestinal: Si tu perro ya fue entrenado para orinar en lugares específicos pero de repente defeca heces en su casa o tiene diarrea, puede tener molestias gastrointestinales. Esto podría ser el resultado de haber ingerido alguna sustancia o alimento contaminado y lo mejor sería que lo lleves con un especialista y hacerle exámenes.
Cambio de dieta: Si ha cambiado recientemente la cantidad o el tipo de comida que le da a tu perro, puede desarrollar un problema en la casa. Con frecuencia, después de un cambio de dieta, tu perro puede desarrollar una diarrea. También podría necesitar defecar u orinar con más frecuencia o en un horario diferente al que tenía antes del cambio.
Medicamentos: Hay una serie de medicamentos que pueden ocasionar la micción frecuente de tu perro y otros problemas de salud. Si tu perro toma algún medicamento, ponte en contacto con su veterinario para saber si ciertos medicamentos que esté consumiendo tu perro podrían estar contribuyendo a sus problemas de suciedad en la casa. Por eso es importante no suministrar cualquier medicamento sin antes haber consultado con un especialista en el tema.
Toma un poco de tiempo a tu perro adaptarse a nuevas rutinas, recuerda que son animales y que su capacidad de analizar de las situaciones son muy limitadas. Intenta tener paciencia y poco a poco verás cambios en su comportamiento y hábitos que te facilitarán las cosas.
No es necesario golpearlos o castigarlos por hacer cosas que te molesten. Lo mejor es tomar las precauciones necesarias para evitar accidentes y cosas negativas en tu casa.