Enfermedades más comunes en los perros y sus síntomas

Enfermedades más comunes en los perros y sus síntomas recopiladas en este artículo. Vamos a contarte acerca de las patologías más relevantes y de sus síntomas. De este modo, estarás alerta y no dudarás en llevar a tu mascota canina al veterinario frente a los síntomas que suelen cursar estas enfermedades.
Sin más vamos ya con las Enfermedades más comunes en los perros y sus síntomas
Parvovirus canino. (Parvo)
Esta patología entra dentro de el calendario de vacunaciones del perro. Se trata de una enfermedad viral que afecta principalmente a los intestinos y al corazón. Pese a que tu perro de cachorro se vacuna frente a la parvo, en España abunda mucho esta enfermedad y los cachorros pueden contraerla al entrar en contacto con las cacas de un perro que sea portadora de esta patología.
La sintomatología del parvovirus canino son:
- Diarreas y vómitos.
- Pérdida de peso y anemia.
- Somnolencia y letargo.
Más de la mitad de los perros (sobre todo cachorros) que sufren esta enfermedad mueren. Así que no dudes en correr al veterinario frente a un cuadro sintomáticos de estas características. La vida de tu mascota depende de ello.
La supervivencia de tu perro frente a la parvo dependerá de la gravedad de la patología y la rapidez del tratamiento. Por eso hay que darse tanta prisa en acudir a la clínica ante un posible positivo del parvovirus canino. Y no te olvides de cumplir con el calendario de vacunas. Es la mejor arma que dispones para evitar contagios. Tanto de la parvo, como del moquillo, la rabia y la hepatitis. (Todas son cubiertas con las vacunas administradas de cachorro.
Torsión gástrica
La torsión gástrica en perros es una enfermedad que suele darse con más frecuencia en razas de perros grandes, como los san bernardos, pastor alemán, doberman o gran danés. La patología en cuestión es una gran dilatación y torsión del estómago, provocado por acumulación de gases, alimentos o líquidos.
Un hábito muy negativo y que a veces puede llegar a generar esta enfermedad es comer muy rápido y tragar trozos muy grandes de alimento. Cuidado con esto, ya que todo esto hace que el estómago se hinche e inflame en exceso. Si además añadimos un giro de estómago, todo se complica, ya que los líquidos y gases se acumulan e impiden que tu mascota pueda eructar o vomitar. Hasta acabar con torsión de estómago o gástrica.
Síntomas de la torsión gástrica:
- Dilatación e inflamación estomacal.
- Estrés y ansiedad.
- Incapacidad para eructar ni vomitar.
- Exceso de salivación.
Esta enfermedad puede llegar a afectar a cualquier perro, independientemente de su edad y tamaño, pero hay algunas razas más propensas genéticamente, como algunas razas grandes con el pecho profundo y largo.
Si tu mascota entra dentro de las razas comentadas, lo mejor que puedes hacer es, como siempre, prevenir. ¿Cómo? Pues debes enseñar a que tu perro coma más despacio, y darle sus dietas en trozos pequeños. Esto se puede lograr mediante técnicas básicas de refuerzo positivo tipo clicker.
También puedes probar a dar a tu mascota sus dietas diarias en dispensadores de alimento y pienso tipo “kong”. Esto obliga al perro a comer más despacio.
Otro modo es buscar en tiendas especializadas dispensadores de comida que se pueden programar para dar a tu mascota sus dietas en pequeñas raciones por el tiempo que le digamos.
Insuficiencia renal
Esta enfermedad renal se caracteriza por la pérdida progresiva e irreversible de las funciones renales del perro. El problema de esta patología es que es difícil de prevenir ya que muchos perros la sufren vía genética. Es decir, algunas mascotas caninas tienen una predisposición heredada.
Pese a todo, la mejor ayuda frente a esta enfermedad es cepillar los dientes de tu perro con frecuencia. ¿Cómo? Si, te lo explico.Una causa común de insuficiencia renal es por una mala higiene bucal de tu amigo canino, las bacterias de los dientes pueden llegar a invadir el torrente sanguíneo y llegar al riñón. Allí prosperan y tu mascota lo acaba lamentando por un insuficiencia renal. ¿Entiendes ahora?
Cepilla los dientes de tu perro todos los días, y si no puedes, pues varias veces a la semana. Además de mejorar el aliento y evitar sarro, mejoras la calidad de vida de tu mascota. Y de paso previenes la insuficiencia renal. Además, te recomiendo una limpieza de dientes hecha por un veterinario en la clínica una o dos veces al año.
Otros factores que redundan en esta enfermedad y que podemos prevenir son por envenenamiento, infecciones o reacciones dañinas de ciertos medicamentos.
Los síntomas pasan por:
- Fiebre
- Variaciones en la ingesta de sus dietas y en la micción.
- Vómitos.
Es muy recomendable esconder los medicamentos lejos de tu mascota, no se vaya a intoxicar. También productos de limpieza y anticongelante.
Enfermedad de Lyme
Se trata de una patología parasitaria producida por garrapatas. Además es la más frecuente que transmiten estos parásitos a los perros. La principal sintomatología de la que te tienes que preocupar es la cojera de una o más patas. También suele ir acompañada de falta de apetito y rigidez de movimientos. Curiosamente, la enfermedad de Lyme puede acarrear problemas renales como la insuficiencia renal. Corre al veterinario. El lo tratará mediante antibióticos y listo.
La mejor prevención es evitar llevar a tu perro a lugares donde abunden las garrapatas y usar un collar antiparasitario u otro producto aplicado directamente a la capa.
Filariosis canina. (El gusano del corazón)
Es una patología parasitaria donde la picadura de un mosquito infestado de larvas del gusano “Dirofilaria” transmite estos parásitos al perro. Esta es otra enfermedad que podemos prevenir mediante una vacuna preventiva de la filariosis canina o usando antiparasitarios como collares o pipetas vía tópica.
La enfermedad se contrae fácilmente solo con la picadura del mosquito infectado. España es una zona endémica de estos gusanos, por lo que toda precaución es poca. Comentar también que en casos avanzados de la enfermedad, suele ser mortal.
Síntomas:
- Debilidad.
- Falta de aliento.
- Estrés y ansiedad.
- Pérdida de audición y resistencia física. Agotamiento.
- Tos aguda.
Tendrás que ir al veterinario a que le haga las pruebas pertinentes a tu perro para administrar la vacuna adecuada según las características del animal y el estado de la enfermedad.
Intoxicación de chocolate
No creo que haga falta decirlo de nuevo, todos lo sabéis; el chocolate es tóxico para tu mascota canina. Pese a todo, son frecuentes las visitas al veterinario por intoxicaciones provocadas por la ingesta de chocolate. De hecho es la segunda causa de envenenamientos que acuden a la clínica. ¿Sabes cual es la primera? Pues la intoxicación por otro chocolate; pero del que se fuma. (Marihuana y hachís, llamado vulgarmente chocolate).
Los factores principales son la cantidad y el tipo de chocolate que haya comido. Y aquí si que importa el tamaño de tu perro; cuanto más pequeños, más se intoxican, ya que las cantidades grandes afectan más a razas con menos peso. No es lo mismo que un pastor alemán se coma 10 gramos de chocolate que un chihuahua. ¿Entiendes?
sintomatología:
- Diarreas y vómitos.
- Jadeos y temblores.
- Irregularidades en la respiración y latidos del corazón.
Si tu perro come chocolate por accidente, corre al veterinario, ya que en grandes cantidades y razas pequeñas puede llegar a ser mortal. Mucho cuidado con el chocolate.
Los síntomas de envenenamiento por chocolate incluyen vómitos, diarrea, estimulación, jadeo y temblores. Los casos más graves pueden causar latidos cardíacos irregulares, convulsiones, ataque cardíaco o incluso la muerte. Si crees que tu perro ha comido chocolate, no esperes a llevarlo al médico.
Cáncer
El cáncer en perros está muy extendido, y cada vez más. Tanto que unos últimos estudios revelan que casi el 50% de los perros en Estados Unidos sufren de cáncer en edades avanzadas. Y a esto, hay que sumar el aumento de la longevidad de nuestras mascotas en los últimos años. Debido a esto, las mascota viven más y por tanto, los cánceres aumentan.
Debes llevar a tu perro a revisiones periódicas al veterinario en busca de este tipo de patologías, ya que, cuanto antes sea detectado, más posibilidades de sobrevivir tendrá el animal.
El cáncer es difícil de detectar mediante su sintomatología, pero suele ir precedido de cambios drásticos de comportamiento y hábitos. También debemos estar alerta frente a “avisos” como:
- Bultos sospechosos en la capa o internos.
- Pérdida de peso y de ganas de comer.
- Anorexia y letargo.
Existen algunos tumores malignos más graves que otros. El linfoma de piel es uno de los más comunes y más fáciles de tratar, otros no tanto. Por eso te repito que lleves a tu mascota al veterinario regularmente para que controlen este tema. Otro factor de alto riesgo es la genética del perro. Muchas veces es heredado.
Hongos
Las patologías fúngicas, como los hongos son otro problema común en perros. Estos, proliferan por el suelo y paredes y suelen ser transmitidos por esporas en el aire. Basta con que tu querido amigo peludo inhale estas esporas para que se contagie de esta enfermedad micótica.
Existen muchos tipos de hongos, y unos son peores que otros en cuanto a que afectan a el hígado, los pulmones o el cerebro. Este último puede llegar a costarle la vida a tu perro. Así que mucho ojo con los hongos.
Las peores patologías fúngicas son:
- Blastomicosis.
- Criptococosis.
- Fiebre del valle.
- Histoplasmosis.
Uno de los grandes problemas de estos hongos, y más concretamente los que originan la blastomicosis (blastos) es que son difíciles de diagnosticar y a menudo no se tratan bien, por que son confundidos con otro tipo de hongo. Solicita a tu veterinario frente a menor duda de que tu perro se haya infectado de hongos la prueba de blastos. Para estar más seguros, también existen pruebas de blasto temprana, aunque tu perro no tenga síntomas de infección.