Razas de perro de tamaño Gigante
En la actualidad podemos encontrar una gran variedad de razas de perro de tamaño gigante. Muchas de ellas se parecerán únicamente en su tamaño, teniendo unas características físicas muy diferentes. Además, dentro de los perros de tamaño gigante también habrá unas razas de perros más grandes que otros, normalmente sin llegar a sobrepasar nunca los 100 kilogramos. Los perros de tamaño gigante destacan por ser generalmente bondadosos y tener un gran corazón. Por desgracia, son propensos a varios problemas de salud como la displasia de cadera y la torsión gástrica, lo que significa que es extremadamente importante que acudan al veterinario ante cualquier mínimo síntoma.
Bullmastiff
Su origen está en Gran Bretaña, y proviene de la familia del Bulldog inglés. Gracias a su gran tamaño y comportamiento será un perro guardián ideal, aunque también estará muy bien viviendo en un ambiente más familiar, pues de hecho es muy cariñoso con niños. Suele pesar unos 60 kilogramos, y su tendencia a la obesidad hace que sea necesario que tenga una alimentación moderada y de calidad, adecuándose siempre a sus características. Además, debe realizar un ejercicio moderado, aunque no excesivo, y como es de suponer debe vivir en espacios grandes. Su pelaje no necesita grandes cuidados, pues será suficiente con cepillarlo varias veces a la semana.
Dogo de Burdeos
El dogo de Burdeos es un perro que suele pesar unos 65 kilogramos, y a pesar de su tamaño es muy tranquilo y bueno. A pesar de que se usaba como perro de peleas, tendrá un comportamiento excelente en el hogar y no necesitará demasiada actividad, aunque sí espacio. Será un gran perro guardián y estará siempre dispuesto a proteger a su familia, sobre todo a los más pequeños, pues les tendrá un gran afecto. El principal cuidado que hay que tener con este perro es respecto a la higiene, pues tiene una serie de pliegues que hay que limpiar cuidadosamente y con frecuencia.
Fila brasileño
Su origen está en el cruce entre el dogo y el mastiff, lo que hace que sea una raza con una gran fuerza. Suele pesar unos 55 kilogramos y ser algo desconfiado con los extraños, por lo que es muy importante que aprenda a socializar correctamente para evitar problemas con otros perros o personas. Además, pueden ser algo tímidos, lo que hace aún más evidente su necesidad de aprender a relacionarse con los demás adecuadamente.
Gran boyero suizo
Es un perro muy tranquilo, aunque también juguetón en muchas ocasiones. También es inteligente, por lo que podrá ser adiestrado fácilmente y sin grandes dificultades. Por supuesto, como ocurre con todos los perros de tamaño gigante, será obligatorio que viva en un espacio grande donde no se sienta encerrado. Si no cuenta con jardín, tendrá que salir a la calle un tiempo suficiente varias veces al día para que pueda disfrutar del aire libre.
Gran danés
El Gran Danés es uno de los perros de tamaño gigante más populares, y también se le puede conocer como Dogo alemán. Es de un tamaño muy grande, y es que puede llegar a pesar hasta 90 kilogramos. Además de esto, es un perro tranquilo con un buen corazón, y no tendrá problemas a la hora de relacionarse con otros perros o con humanos, aunque puede ser algo tímido con los desconocidos. Sin embargo, con su familia será un perro muy cariñoso, además de fiel, y se llevará especialmente bien con niños.
Lebrel escocés
Este perro tiene un tamaño especialmente grande, y es que puede llegar a pesar incluso 100 kilogramos. Es de la familia de los galgos, por lo que es un perro bastante alto, pero también fuerte. A diferencia de lo que ocurre con otras razas de tamaño gigante, el Lebrel escocés es muy sociable por naturaleza y se llevará bien con prácticamente todo el mundo, tanto humanos como otros animales. Necesita ser cepillado de vez en cuando para evitar los nudos en su pelo, aunque como ocurre con casi cualquier perro no será recomendable bañarlo muy a menudo.
Leonberger
Este es un perro muy tranquilo, además de inteligente, y puede vivir perfectamente en familia, ya que se llevará muy bien con niños y será muy cariñoso y fiel. Suele pesar unos 70 kilogramos, aunque su abundante pelaje hace que parezca un perro aún más grande. Necesita ser cepillado con frecuencia, y será algo torpe en su día a día, por lo que no está de más tenerlo vigilado. Además, lo pasará mal si está demasiado tiempo solo en casa, pues sentirá un gran apego por su familia y le gustará estar siempre acompañado.
Lobero irlandés
Es uno de los perros más altos que podemos encontrar en la actualidad, por lo que en sus orígenes se usaba como perro guardián, algo en lo que es excelente. Además, como su nombre indica, también se usaba para la caza de lobos en Irlanda. Su pelaje es corto, y puede ser de una variedad de colores como gris, negro, blanco, rojo, atigrado o leonado. Es uno de los perros más dóciles que se pueden encontrar hoy en día, y es ideal para vivir en familia a pesar de su gran tamaño.
Komondor
El origen de esta raza está en Hungría, y se usaba como perro guardián y pastor. Destaca por tener el pelo formándole una serie de mechones que tienen una apariencia similar a las rastas, teniendo así un pelaje muy característico.
Es muy importante que el Komondor sea adiestrado correctamente desde que es pequeño, pues tiene una fuerte personalidad que podría causar algún problema de comportamiento si no ha aprendido cómo debe comportarse.
Como ocurre con muchos perros de tamaño gigante, esta raza será propensa a la displasia de cadera, algo que podría dificultarle a la hora de caminar y que tendrá que ser examinado por el veterinario ante los primeros síntomas.
Kuvasz
Puede llegar a pesar hasta 62 kilogramos, y su pelaje blanco y esponjoso es similar al de una oveja. Este pelo será necesario cepillarlo cada día, pues será propenso a los nudos y de lo contrario podría estropearse demasiado e incluso causarle problemas en la piel.
Es un perro muy valiente, por lo que actuará muy bien como perro guardián, aunque también le encantará pasar tiempo con su familia. Será muy fácil su adiestramiento gracias a su increíble memoria, aunque es importante que se eduque desde pequeño para que aprenda que no siempre puede hacer lo que él quiera.
Mastín español
El Mastín español macho tiene una gran diferencia de peso con el Mastín español hembra, pues mientras que ellos pueden llegar a pesar hasta 100 kilogramos, ellas por lo general no alcanzarán los 80 kilogramos. Es una raza muy inteligente, y también destaca por su buen corazón, por lo que será muy fácil convivir con un Mastín español.
Además, serán especialmente cariñosos, sobre todo las hembras, por lo que son perros perfectos para vivir siempre rodeados de su familia. Se llevará bien con niños y con otros animales, aunque puede ser algo posesivo.
Mastín inglés
El Mastín ingles, como su propio nombre indica, proviene de Reino Unido. En sus orígenes era fácil de encontrar como perro guardián, pero su gran personalidad hace que hoy en día sea mucho más popular como mascota. Por lo general, su peso puede llegar a alcanzar los 100 kilogramos, siempre pesando algo menos las hembras que los machos.
Además de ser un perro dócil y educado será muy valiente, y estará dispuesto a proteger a su familia ante cualquier problema que pueda haber. Puede llegar a ser algo celoso y desconfiado con los extraños, algo que se puede solucionar enseñándole a socializar desde el primer momento. Entre los problemas de salud más característicos de la raza están la displasia de cadera y la torsión de estómago.
Mastín napolitano
Aunque será también un gran perro guardián, el Mastín tibetano destaca por ser muy cariñoso y noble. Puede llegar a pesar unos 60 kilogramos, por lo que no es de los perros más grandes que podamos encontrar. A pesar de esto, necesita ingerir una gran cantidad de comida al día, por lo que es muy importante que siempre sea de gran calidad para que no perjudique su salud. Además, no podrá vivir en cualquier casa, pues necesitará un espacio suficiente donde se sienta cómodo y nunca encerrado o agobiado.
Mastín tibetano
Como es de esperar, su origen está en China, donde se usaba como perro de guerra gracias a su fuerza y potentes ladridos. Con su familia será muy protector y cariñoso, mientras que con los extraños normalmente se llevará mal. Por eso mismo, es necesario que se eduque desde que es un cachorro para que aprenda que no tiene que desconfiar de los extraños ni tiene que actuar inadecuadamente frente a ellos. Lo normal es que su peso alcance los 70 kilogramos, y su rugido es tan fuerte que muchas veces se ha comparado incluso con el de un león.
San Bernardo
Es una de las razas de perros gigantes más populares, y también una de las más buenas. De hecho, se caracteriza principalmente por poseer un gran corazón y llevarse bien con todo el mundo, intentando evitar siempre los problemas con los demás. Puede llegar a pesar unos 90 kilogramos, y el principal cuidado que necesita es con respecto a su pelo, pues hay que cepillarlo cada día. De o contrario, se le enredará, lo que unido a un mal cuidado podría ocasionar problemas de piel.
Como ocurre con todos los perros de gran tamaño, necesitará un espacio amplio donde vivir, y también grandes cantidades de comida de buena calidad para alimentarse.
Terranova
La mirada y expresión facial del Terranova ya indica que es un perro muy bondadoso que se llevará bien con todos. De hecho, muchas veces se usan como perros salvavidas, ya que estarán dispuestos a ayudar a cualquier persona o animal que lo necesite. Sin embargo, si no está correctamente adiestrado podría sacar todo su carácter y ser demasiado dominante. Por eso, un correcto entrenamiento desde que es un cachorro será esencial para que no haya ningún problema con el Terranova en el hogar.
Tosa inu
También se puede conocer como Tosa Ken o Tosa japonés, y puede llegar a pesar hasta 100 kilogramos, siendo uno de los perros más grandes que existen hoy en día. Se caracteriza por ser muy fiel, aunque también algo tímido. Tenderá a desconfiar de los extraños, por lo que será muy importante enseñarle a socializar desde que es un cachorro para que no tenga problemas posteriormente. De hecho, si no aprende a socializar correctamente podría ser agresivo con otros perros o incluso humanos, lo que hace aún más evidente lo importante que es.
Antiguamente se usaban como perros de pelea, por lo que en España aún en día son considerados como perros potencialmente peligrosos. Esto significa que siempre deberá pasear con correa y bozal, aunque en la mayoría de ocasiones si están bien educados no debería ser necesario.